El mayor brote de difteria en Europa occidental en 70 años
El estudio traza rutas de transmisión
En 2022, Europa Occidental experimentó el mayor aumento de infecciones de difteria notificadas en 70 años. Los datos clínicos y genómicos del brote apuntan a rutas de transmisión a lo largo de vías de migración establecidas hacia Europa. Las intervenciones rápidas lograron contener el brote, aunque las cepas de ese periodo siguen causando nuevas infecciones en la región.
A lo largo de 2022, varios países europeos notificaron un número inusualmente elevado de infecciones causadas por Corynebacterium diphtheriae, que afectaban principalmente a refugiados recién llegados. En ese momento, no se documentó la transmisión dentro de las poblaciones locales de los países afectados.
Un nuevo estudio publicado en el New England Journal of Medicine (NEJM) revela ahora, por primera vez, las vías de transmisión implicadas. Un consorcio europeo de investigación analizó los perfiles genómicos de 363 aislados bacterianos. Estas muestras procedían de pacientes de 10 países que notificaron un aumento de casos de difteria entre enero y finales de noviembre de 2022, y que analizaron conjuntamente sus datos de secuenciación: Alemania (118 aislados), Austria (66), Reino Unido (59), Suiza (52), Francia (30), Bélgica (21), Noruega (8), Países Bajos (5), Italia (3) y España (1).
Transmisión de la difteria a lo largo de las rutas de viaje de los migrantes
"Las cepas de difteria notificadas en 2022 comparten un alto grado de similitud genética, lo que indica o bien una fuente común de infección o bien lugares específicos a lo largo de las rutas migratorias hacia Europa donde se produjo una transmisión sostenida", afirma Andreas Hoefer, experto en microbiología del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) y coautor del estudio.
Según el estudio, casi todos los 362 pacientes (98%) eran varones, con una edad media de 18 años en el momento de la recogida de datos. La mayoría (96%) había viajado recientemente desde sus países de origen a los países donde posteriormente se diagnosticó la difteria. De los 266 pacientes de los que se disponía de datos sobre el país de origen, 222 (83%) procedían de Afganistán o Siria. La mayoría siguió rutas migratorias a través de países de los Balcanes Occidentales hasta sus destinos, con un total de 28 países de tránsito documentados.
De los 346 pacientes con datos clínicos, 268 (77%) tenían difteria cutánea, que afecta a la piel, mientras que 52 (15%) presentaban una forma respiratoria que ataca las vías respiratorias. "La difteria se presenta con un amplio espectro de síntomas clínicos. Especialmente temidas son las complicaciones respiratorias causadas por bacterias productoras de toxinas, que pueden poner en peligro la vida", explica Adrian Egli, director del Instituto de Microbiología Médica de la Universidad de Zúrich y uno de los responsables del estudio.
El rápido intercambio de datos de secuenciación permitió una rápida respuesta en toda Europa
"El rápido intercambio de datos de secuenciación genómica entre los países declarantes permitió definir los puntos en común de las cepas de difteria a través de las fronteras", añade Sylvain Brisse, profesor del Instituto Pasteur y otro de los autores principales del estudio.
"La detección del primer caso de difteria respiratoria en Austria en casi 30 años, en 2022, pone de relieve la importancia crítica del intercambio transfronterizo de información y la colaboración internacional en la respuesta a los brotes", afirma Stefanie Schindler, microbióloga de la Agencia Austriaca de Salud y Seguridad Alimentaria (AGES) y coautora del estudio. "Notamos un aumento dramático de bacterias diftéricas productoras de toxinas en Alemania en el verano de 2022, e inicialmente informamos a nuestros colegas austriacos y suizos en la red europea informal de difteria", dice Andreas Sing, jefe del Laboratorio Nacional de Referencia de Difteria de Alemania en la Autoridad de Salud y Seguridad Alimentaria de Baviera (LGL).
El análisis de secuenciación también proporcionó información sobre la susceptibilidad antibiótica de las cepas bacterianas, confirmada posteriormente mediante pruebas de susceptibilidad antimicrobiana. Esta información fue decisiva para orientar las medidas de salud pública, incluida la identificación y detección de la resistencia a antibióticos como la eritromicina.
Actualizar las vacunas y permanecer alerta
El estado de vacunación de los pacientes afectados fue difícil de evaluar debido a la documentación médica incompleta. Según los datos disponibles, sólo cuatro pacientes estaban vacunados contra la difteria, 10 declararon no estar vacunados y se desconocía el estado de vacunación de 290 pacientes. Para quienes han completado su serie de vacunación contra la difteria, la probabilidad de contraer la enfermedad es muy baja. Normalmente, una vacuna de refuerzo 10 años después de la última dosis es suficiente para mantener la protección.
Silvia Funke, experta del ECDC en enfermedades prevenibles mediante vacunación, concluye que "el estudio muestra lo importante que es asegurarse de que todo el mundo está vacunado contra la difteria, incluidas las personas vulnerables como los inmigrantes, las personas sin hogar, las personas que se inyectan drogas o las personas no vacunadas. Esto también significa que los clínicos deben estar atentos y prestar atención a los síntomas de la difteria, especialmente cuando sus pacientes pertenezcan a grupos vulnerables o tengan algún vínculo con estas poblaciones".
A finales de 2022, intervenciones rápidas como el rastreo de contactos y el cribado de casos secundarios redujeron significativamente el brote. Sin embargo, los datos genómicos muestran que ciertas cepas siguen circulando, lo que obliga a las autoridades de salud pública y a los profesionales sanitarios a mantener la vigilancia. "Hasta la fecha no se ha determinado ni el alcance total de la circulación ni el lugar exacto de la infección. Por eso, tanto los profesionales de la salud pública como los sanitarios deben permanecer vigilantes para evitar una mayor propagación de la difteria en Europa", subraya Hoefer.
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