Una planta medicinal tradicional podría combatir la malaria resistente a los fármacos

15.05.2023 - Canadá

Gran parte de lo que hoy se considera medicina moderna se originó como remedios populares o prácticas indígenas tradicionales. Estas costumbres siguen vivas hoy en día y podrían ayudar a tratar diversas afecciones. Según publica ahora ACS Omega, un equipo de investigadores ha identificado compuestos en las hojas de una planta medicinal concreta, el té del Labrador, utilizada en las Primeras Naciones de Nunavik (Canadá), y ha demostrado que uno de ellos tiene actividad contra el parásito responsable de la malaria.

Computer-generated image

Imagen simbólica

"Té del Labrador" hace referencia a varias plantas estrechamente relacionadas, todas ellas miembros del género Rhododendron. Se trata de pequeños arbustos perennes de hojas vellosas que, como su nombre indica, se hierven para preparar tisanas de uso común entre los inuit y las naciones indígenas de Estados Unidos y Canadá. Según se dice, las bebidas elaboradas con sus hojas o raíces pueden ayudar a tratar resfriados o gripe, dolores de cabeza o de estómago, congestión nasal y muchas otras dolencias. Estudios anteriores han demostrado que los aceites esenciales extraídos de las plantas tienen propiedades antimicrobianas, lo que podría ayudar a combatir los microbios resistentes a los antibióticos. El té del Labrador enano, o Rhododendron subarcticum, produce una infusión especialmente aromática y crece en las condiciones más duras del subártico, que se extiende desde Alaska hasta Siberia, justo al sur del Círculo Polar Ártico. A pesar de su uso común como medicina tradicional, su composición química y sus posibles aplicaciones antimicrobianas siguen estando relativamente poco estudiadas. Por ello, Normand Voyer y sus colegas quisieron caracterizar por primera vez la composición de R. subarcticum y probar su actividad antiparasitaria.

El equipo recolectó hojas de R . sub arcticum en Nunavik, una región del norte de Quebec. Los investigadores extrajeron el aceite esencial de las hojas y lo analizaron con cromatografía de gases, espectrometría de masas y detección por ionización de llama, para identificar 53 compuestos. Resultó que el 64,7% del aceite estaba compuesto por ascaridol, seguido de p-cimeno con un 21,1%. Esta combinación de compuestos no se había descrito anteriormente en variedades de té del Labrador norteamericanas estrechamente relacionadas, aunque sí en subespecies originarias de Europa y Asia.

Para comprobar si este aceite esencial tenía propiedades antipalúdicas, el equipo expuso dos cepas de Plasmodium falciparum, un parásito causante de la malaria, al aceite o sólo al ascaridol. En el experimento, una de las cepas era resistente a los fármacos antipalúdicos conocidos. Los datos mostraron que el ascaridol era el principal componente que actuaba contra ambas cepas del parásito, lo que concuerda con otras medicinas tradicionales antiparasitarias también ricas en este compuesto. Los investigadores afirman que este trabajo refuerza la importancia de investigar y proteger las plantas utilizadas en la medicina tradicional, especialmente las de climas más duros afectados por el cambio climático.

Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Inglés se puede encontrar aquí.

Publicación original

Más noticias del departamento ciencias

Noticias más leídas

Más noticias de nuestros otros portales

Lucha contra el cáncer: últimos avances y progresos