Un interruptor para el reloj interno

Nuevos enfoques para la biología y la medicina cuánticas

19.04.2024
Collage/Universität Innsbruck

Los investigadores demuestran que la resonancia magnética nuclear puede utilizarse para influir en el reloj interno de las células.

Investigadores de la Universidad de Innsbruck estudiaron el efecto de la resonancia magnética nuclear en el reloj interno de las células a distintas horas del día. Para su sorpresa, el reloj podía encenderse y apagarse en función de si el tratamiento se realizaba de día o de noche. Los efectos del campo magnético observados se basan en procesos biológicos cuánticos.

En un nuevo estudio, un equipo dirigido por Margit Egg, del Instituto de Zoología de la Universidad de Innsbruck, irradió células de ratones con resonancia magnética nuclear terapéutica (tNMR) para investigar el efecto, sospechado desde hace tiempo, de los campos magnéticos débiles sobre el reloj interno de las células de mamíferos. En cierto modo, la terapia de resonancia magnética nuclear es una versión reducida de la resonancia magnética. Combina un campo magnético débil con la correspondiente onda de radio que hace resonar los protones de hidrógeno de las células y tejidos irradiados. La energía transferida en el proceso se devuelve a las células tras la terapia. "Gracias al campo magnético mucho más débil utilizado en la tNMR y a la radiofrecuencia correspondientemente más baja, el tratamiento es totalmente no invasivo y ya se utiliza desde hace dos décadas para tratar la artrosis, la osteoporosis y la cicatrización de heridas", explica Margit Egg.

Los resultados publicados anteriormente por el grupo de investigación han demostrado que la resonancia magnética nuclear modifica todo el metabolismo de la célula. Entre otras cosas, se reduce el metabolismo del lactato, mientras que la respiración celular se estabiliza a pesar de la falta de oxígeno. En el nuevo estudio, el equipo de Margit Egg ha podido demostrar que el reloj interno de las células puede activarse y desactivarse al mismo tiempo. "Este efecto depende de la hora del día en que se realice el tratamiento, en las primeras horas del día o en la primera mitad de la noche", explica la bióloga. "En función de esto, el reloj interno se activa o desactiva". El radical de oxígeno superóxido resultó ser la interfaz entre el campo magnético físico y la célula viva. Dado que el reloj interno, al igual que la vía de señalización del oxígeno, desempeña un papel central en enfermedades como los infartos de miocardio, los derrames cerebrales y el cáncer, estos hallazgos de la investigación amplían el abanico de tratamientos médicos.

Nuevos enfoques para la biología y la medicina cuánticas

En estudios posteriores, el equipo quiere investigar si el responsable de los efectos observados es el campo magnético, las ondas de radio o sólo la combinación de ambos en forma de tNMR. Los resultados también son de interés para la biología cuántica, ya que pueden aportar nuevos conocimientos sobre el llamado mecanismo del par radical. Este mecanismo ya se ha utilizado para explicar la capacidad de las aves migratorias para orientarse según el campo magnético terrestre. "Nuestros últimos estudios demuestran ahora que el mecanismo del par radical no sólo constituye la base del sentido magnético de las aves migratorias, sino que también puede explicar un número cada vez mayor de efectos emergentes del campo magnético en las células, que tienen un enorme potencial terapéutico. El control del reloj interno, que interviene en numerosas enfermedades, es uno de ellos", explica Margit Egg.

Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Alemán se puede encontrar aquí.

Publicación original

Más noticias del departamento ciencias

Noticias más leídas

Más noticias de nuestros otros portales

Lucha contra el cáncer: últimos avances y progresos